El colegio San Luis Gonzaga, premiado en la First Lego League

El equipo solanero posó con el trofeo conseguido en el concurso celebrado en Toledo

Gabriel Jaime

El colegio San Luis Gonzaga consiguió un galardón en la First Lego League Spain dentro de la categoría ‘Challenge’. La decena de chavales de 6º de primaria que representó al centro en el campeonato celebrado el pasado sábado en Toledo obtuvo el premio ‘A los valores’. La recompensa fue toda una sorpresa y supone un espaldarazo para los alumnos que llevan varios años cursando la asignatura de robótica. La experiencia tendrá continuidad el próximo año, según ha declarado su director, Miguel Díaz-Cano.

“No lo esperábamos. Íbamos a conocer la actividad, a disfrutar, y al final, hemos conseguido un premio que no esperábamos”. Así lo argumentó el docente en declaraciones a Radio Horizonte. La representación solanera participó en la categoría challenge (alumnos y alumnas con edades comprendidas entre los 9 y los 16 años) y fueron los más pequeños de su categoría.

El concurso ponía en liza cinco premios entre los dieciséis equipos participantes, y el colegio tenía pocas esperanzas de conseguir alguno de ellos, según reconoció Díaz-Cano. “No aspirábamos a nada y nuestra sorpresa fue mayúscula cuando nos dieron el Premio A los Valores Lego”. Explicó que el premio juzgaba la innovación, la creatividad, el compañerismo y el trabajo en equipo. “Por eso estamos muy orgullosos del premio y con ganas de volver a participar”.

El director indicó que el grupo había trabajado durante cinco meses para preparar este proyecto, cuyos objetivos principales eran la investigación, la resolución de problemas, la ingeniería y la programación. Para ello, consiguieron programar un robot de Lego para conseguir las misiones que les plantearon en el concurso. Los alumnos también presentaron un proyecto con un barco petrolero que tenía una protección especial para evitar desastres ecológicos como el del ‘Prestige’.

Los alumnos ya tenían una base sólida porque llevan cuatro años estudiando la asignatura de robótica en el centro. Pero hizo falta un entrenamiento intensivo durante las últimas semanas, con sesiones que se desarrollaron fuera del escolar e incluso los fines de semana. “Ha llevado mucho trabajo, pero el esfuerzo se ha visto compensado. Siempre decimos que educando en el esfuerzo se consiguen grandes retos”.

El equipo formado por una decena de escolares estuvo acompañado por sus familias y también por la mayoría de los profesores del claustro, en una experiencia inolvidable que tendrá continuidad en el futuro, según recalcó el director.

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