Almarcha y Fran Marín rescatan un punto imposible en Azuqueca: «Habla muy bien del equipo»

Reyes hizo el 0-1 en Azuqueca, su sexto gol esta temporada

        Aurelio Maroto

       No es lo mismo llamar que salir a abrir. Por eso, la explosión de júbilo amarilla en el municipal ‘San Miguel’ de Azuqueca de Henares corría paralela a la enorme decepción de los locales, incrédulos ante lo que acababa de suceder. Una alineación de astros, y además con DNI solanero, sobrevoló de repente para que el CF La Solana arañara un punto imposible. Los goles de Almarcha y Fran Marín, ambos en tiempo de prolongación, evitaron una derrota que parecía inevitable. Y ojo, porque ese empate puede valer oro por muchas razones.

      “Nos sabe a gloria porque sacar puntos fuera de casa siempre es muy complicado, y más cuando pierdes 3-1 en el minuto noventa”, decía Juan Carlos Peñalver en declaraciones a Radio Horizonte. El técnico cree que la forma en que se produjo el empate refuerza mucho la autoestima del equipo y demuestra su resiliencia cuando todo parece perdido. “Es un punto que habla muy bien del equipo, de la capacidad de lucha y entrega que están teniendo”.

        Es probable que esa resiliencia se mitifique en momentos así, porque un 3-1 en el descuento, y más fuera de casa, suele ser sinónimo de derrota. Pero sucedió y La Solana se está abonando a épicas parecidas, como ocurrió con los empates arrancados en Torrijos (1-1), Tarancón (2-2) o Villarrobledo (2-2), también en las postrimerías. ¿Suerte?, tal vez. ¿Empeño?, sin duda. La realidad es que La Solana lleva toda la temporada compitiendo muy bien a domicilio. De hecho, 5 de sus 7 derrotas han sido en La Moheda. Es en casa donde tiene más problemas, aunque también es verdad que ha sido frente a rivales que ahora mismo están entre el primero y el séptimo de la clasificación (Quintanar, Illescas, Conquense, Calvo Sotelo y Villacañas).

        Precisamente por eso, este empate ratifica que La Solana está de sobra capacitada para pelear la permanencia. Es un hecho real, no un deseo. Juan Carlos Peñalver, que en Azuqueca vio el partido desde la grada, es plenamente consciente de lo que necesita el equipo: una victoria solvente en La Moheda. Por eso, el choque del próximo domingo frente al Villarrobledo (17 h) se antoja fundamental. Los roblenses vienen de ganar al Torrijos, pero no andan precisamente sobrados en la clasificación. “Este empate tenemos que hacerlo bueno el próximo domingo ganando en La Moheda como sea”, admitía el joven entrenador solanero. No le falta razón.